miércoles, 9 de diciembre de 2009

ACEPTO... PERO DANDO Y DANDO. Primera petición.

Que el costo de mi alquiler subirá, que le suben a los cigarros, o peor aún, a mi tan adorada y saboreada pilsener…

Pues bien, las últimas dos cosas, con todo el dolor de mi cerebelo -pero con el alivio de mi hígado y pulmones- en dado caso, me obligarán a reducir el consumo ¿y esto qué tiene de malo?

Lo primero, lo de mi alquiler, pues bueno, yo lo pago, sí… yo pago, yo estoy dispuesto a sacrificar mi bolsillo, impuestos hay en cualquier parte del mundo y hasta son leves los que tenemos en el país (y hay muchos que no tenemos). En mi presunción de persona civilizada que me creo ser, no veo por qué no ajustarse a un aumento tributario, a volverme un consumidor más crítico y consciente, a asumir cierta responsabilidad solidaria, a darle una oportunidad a algo nuevo.

Ahora, yo por supuesto voy a exigir algo a cambio de mi sacrificio, y este sacrificio se mantendrá con el mismo entusiasmo en medida que la aplicación de los impuestos se vea reflejada con el cumplimiento de las demandas ciudadanas

Y yo voy con mi primera petición…

Pues en primer lugar, pido transparencia en el uso de esos fondos de los cuales mi bolsillo es participe; al tipejo aquel, ahora se le conocen 219 millones (por cierto, qué cifra más absurda) con los que hizo lo que quiso, y nosotros nos damos cuenta hasta que ya no se puede hacer nada al respecto, y eso, es nada más lo que se le conoce.

Es necesario que el gobierno me retribuya mi sacrificio, haciéndome saber que esto no volverá a pasar, por que toma la iniciativa de abolir estos mecanismos -que por cierto, ahora le favorecen- ¿qué mejor manera de ganar mi confianza que romper en mi cara sus credenciales de "facilidades de bienes públicos"?

Parte de esta transparencia, es que salgan a flote todas estas movidas de las administraciones anteriores, así, me da la oportunidad de tener el ojo donde suceden las cosas, así me da el poder de saber vigilarle, con mirada crítica. Mejor aún si se penalizan estas malas jugadas, pues se sienta precedente, y se expondrán a la misma suerte si las condiciones son similares al haber alternancia.

Lo primero que pido, es que el gobierno comience a desparecerse a la administración anterior en cuestiones de transparencia… ese, es un primer pago justo que el gobierno me puede hacer por mi sacrificio tributario, y para esta retribución no se requiere más que voluntad política, probablemente no sea necesario ni un centavo de los millones que se recaudarán con nuestro aumento de aporte, que así como está la economía, es una buena patada a la bolsa.

Me quedo entonces, a la espera...